La normatividad penal de un país debe ajustarse a las verdaderas necesidades de su colectividad y ser el reflejo real de la evolución de la sociedad, donde la función punitiva y preventiva del Estado estén presentes y cumplan con el mandato constitucional de proteger a la sociedad y la readaptación del infractor de acuerdo a una política criminal.

La Ley Penal es aquella que define los delitos, los crímenes y las posibles sanciones o penas de acuerdo a la tipicidad, antijuricidad y la irreprochabilidad del que ha infringido dicha ley penal.

En el departamento central el índice delincuencial es alarmante, por lo que el profundo análisis y estudio de la parte especial del derecho penal de fondo se torna imprescindible. -

La función represiva tiene su razón de ser en la tutela social. Luego ella debe estar limitada por la justicia y la utilidad. Es más importante la prevención de los delitos que su castigo, desde el punto de vista del interés de la sociedad. En consecuencia, debe prestarse mayor atención a los medios preventivos de la criminalidad, especialmente a educación del pueblo.